Cualquier página web o dispositivo conectado a internet cuenta con una dirección IP de conexión a internet que no es más que un identificador de cada uno de esos dispositivos. La IP 192.168.1.1 es una de esas direcciones. Como podemos apreciar, es de carácter numérico.
Una de sus principales características es que queda reservada para empresas o particulares y es la que usan la gran mayoría de routers, pese a que hay otras alternativas. Es un tipo de IP privada para uso exclusivo de dispositivos conectados a una red local, ya sea en el hogar o en la empresa.
Normalmente viene escrita en la parte inferior del router o módem en una pequeña placa o pegatina junto con otras informaciones técnicas. Debemos tener en cuenta que, aunque esta sea la más común podría ser otra diferente a 192.168.1.1.
La IPv4
Otro concepto importante a la hora de entender las IP es el IPv4. Este es un protocolo de conexión a internet. Exactamente el protocolo número 4 de su versión, pero el primero que ha sido implementado de forma extensiva.
Fue la primera versión implementada para la producción de ARPANET, en 1983. ARPANET es una red de computadores creada por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos para fomentar la comunicación entre diferentes instituciones.
Como consecuencia del desarrollo de internet rápidamente quedó saturada, lo que propició el desarrollo de IPv6.
La proliferación de teléfonos móviles, el aumento de personas conectadas a internet y el mal aprovechamiento de muchas direcciones han sido algunas de las principales causas que han propiciado el agotamiento de la IPv4.
Como solución a este problema de falta de espacio en el protocolo IPv4, se creó la dirección IP 192.168.1.1, dando lugar al bloque 192.168.X, reservado para uso privado de redes, consiguiendo de esto modo, destacar dentro de las redes inalámbricas a computadores.
Cuando estamos configurando una red Wifi para conectar, por ejemplo, nuestro teléfono móvil (o celular) es frecuente encontrar “IPv4” (Internet Protocol version 4).
Este código se refiere a las interconexiones de red basadas en Internet. IPv4 usa direcciones de 32 bits, limitadas a 4.3 millones de direcciones únicas, muchas de las cuales están dedicadas a redes locales (LAN).
Los routers siempre implementan la dirección IP 192.168.1.1. Para a continuación asignar los demás bloques a cada uno de los ordenadores conectados a esa red.
Por ejemplo, en las grandes empresas, la mayoría de ordenadores están conectados en red, cuando se accede a estas, a través del IP se podrá identificar el ordenador conectado.
Cómo acceder a la IP 192.168.1.1
La manera más fácil de acceder a ella es a través del navegador. Simplemente tenemos que abrirlo y escribir el código de números directamente y pulsar intro.
Seguidamente aparecerá un menú en el que habrá que introducir el nombre de usuario y contraseña, que en muchos casos es admin para los dos o admin y 1234.
En caso de tener algún problema podemos recurrir a las instrucciones de uso o también cabe la opción de llamar al operador, que además de resolver nuestras dudas pueden acceder telemáticamente a nuestro sistema.

Una vez dentro podremos alterar la configuración y ver las características, tales como la velocidad de conexión, seguridad, LAN, WAN…
Si accedemos a los menús que nos aparecen podemos ver más información. Por ejemplo: LAN, donde se configura la dirección IP del router; NAT, para abrir los puertos; hacer cambios en la DNS (cada proveedor tiene las suyas)…
Se puede ocultar el punto de acceso o hacer que los equipos que se conecten no se vean entre sí, o crear redes para visitantes, entre otras muchas alternativas.
También se pueden configurar las opciones de seguridad, canal de conexión (manual o auto), potencia de transmisión para determinar la longitud de la señal, o incluso ver los equipos que se han conectado a nuestro punto de acceso.
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Configurando el router
La dirección IP 192.168.1.1 nos ayuda a acceder a la configuración del router fácilmente, para realizar cualquier tipo de alteración como podría ser la contraseña, por ejemplo.
Para ello, debemos escribir en primer lugar la dirección IP en la barra del navegador, como dijimos anteriormente, para confirmar que es la que estamos usando. Si todo está correcto, aparecerá la pantalla de login, en la que escribiremos nuestro nombre de usuario y la contraseña.
El nombre de usuario y la contraseña pueden variar según la empresa proveedora de servicios y su combinación podría ser: admin/admin o admin/1234.
Para concluir la configuración de la nueva contraseña, debemos seguir los pasos indicados en el manual.
En el caso de que hubiésemos alterado la contraseña y no la recordásemos, nuestra única opción es resetear el módem, lo que no llevaría a su estado de fabricación y perderíamos todas las configuraciones alteradas por nosotros mismos.
Cómo abrir y cerrar los puertos del router
Otro punto realmente importante durante todo el proceso es la apertura o cierre de los puertos del router. Los puertos son el medio por el cual entra y sale información de nuestro router hacia internet.
Por regla general, es más seguro tenerlos cerrados, pero dependiendo del tiempo de uso que le vas a dar a tu conexión es posible que en algún caso se te exija mantenerlos abiertos.
En ese caso debemos entrar en configuraciones avanzadas y una vez allí buscar el apartado NAT. Dentro de NAT tenemos que especificar qué tipo de puerto queremos mantener abierto y su número.
Para que todo resulte más fácil, es importante definir también qué es el NAT y cuáles son algunas de sus principales características.
NAT (Network Address Translation) o traducción de direcciones de red es un sistema de intercambio de paquetes de datos que, en principio, no son compatibles. Durante este proceso también hay que editar esos paquetes de datos.
Gracias a NAT podemos conseguir que muchos equipos se conecten bajo la misma IP, ahorrando así miles y miles de direcciones, aunque usa un puerto para cada dirección.
Las direcciones que usamos dentro de una red privada no llegan a internet a menos que las pasemos por NAT. Gracias a la invención de NAT las redes públicas todavía funcionan, de otro modo, la direcciones ya se habrían agotado.
También es importante aclarar que NAT no es un servidor proxy. Mientras que el primero es transparente, en el caso del servidor proxy hay que hacer una configuración.
Otra de las grandes ventajas de NAT reside en que facilita la administración de redes. Cuando se cambia de servidor web entre dispositivos no hay problemas con enlaces rotos, solo hay que redireccionar NAT hacia el nuevo dispositivo.
Consejos de seguridad
Es importante que cambies la clave que viene por defecto para mejorar tu seguridad. La clave que viene por defecto no suele tener un padrón de seguridad muy elevado y es fácil pasar esa barrera. Corremos el riesgo de que alguien acceda y consiga cambiar toda la configuración del router.
Si eres un usuario avanzado es recomendable alterar el puerto de entrada, pero para ello además de conocimientos avanzados se recomienda el uso de algún manual.
Ventajas del IP 192.168.1.1
Una de las ventajas de la red IP 192.168.1.1 es que es posible dividir la señal para crear otra red Wifi. Esto nos ayudará a ofrecer esa otra red a otros usuarios evitando con ello que la nuestra se sature, lo que permite un uso más eficiente.
Para conseguir el máximo provecho de una red Wifi debemos realizar la configuración que mejor se adapte a sus características.
No obstante, en la mayoría de los casos no suele ser así, lo que produce redes en las que todos sus recursos no son aprovechados de forma eficaz.
También es importante tener en cuenta que las claves de los routers suelen tener una combinación de números y letras casi imposible de recordar.
Igualmente debemos considerar que las señas son sensibles al uso de mayúsculas y minúsculas, que en caso de no ser insertadas de forma adecuada nos llevarán a tener que repetirla una y otra vez.
Configurar una segunda red en casa o en la oficina puede ayudar a mejorar la seguridad de la red principal. Al acceder a su configuración, podemos dejar visible solo aquella que está orientada a los invitados, de modo que no podrá vulnerar la principal.
La IP 192.168.1.1, además de servir para crear una interfaz en cada una de las redes, posee los recursos necesarios para sacar el máximo provecho a cualquier tipo de red. Además, este último puede ser ideal para ofrecer un servicio adicional.
Soporte técnico
En caso de necesitar soporte técnico una fuente muy recomendable son los distintos foros existentes en cada una de las compañías proveedoras de servicios que, además, son gestionados por técnicos.
Allí podrás acceder a una gran cantidad de contendido, como problemas de otros usuarios y las distintas soluciones que se les ha ofrecido hasta conseguir el resultado deseado, y podrás expresar cuál es tu problema o duda.
Con toda seguridad alguien te va a ayudar, suelen ser foros de gran utilidad donde cualquier tipo de duda queda resuelto rápidamente. Recuerda que siempre necesitarás saber cuál es tu IP, tu número de usuario y tu contraseña.