Un router es un aparato que habilita que diferentes dispositivos compartan una misma conexión a internet. Un buen dominio de sus características y posibilidades es vital para obtener un óptimo aprovechamiento de nuestra red privada.
Al comprarlo en la misma caja en la que viene podemos encontrar muchísima información como frecuencia, la sensibilidad, certificados, requisitos del sistema… Además del aparato encontraremos una guía, la cual es muy recomendable leer.
Tener conocimientos básicos sobre su funcionamiento y configuración es importante para aprovecharlo al máximo y estar protegidos.
La gran mayoría de routers son muy parecidos, se componen de unas luces en la parte frontal que se mantendrán parpadeando o encendidas de forma permanente indicando que la función que representan está funcionando con normalidad. En esa parte podremos apreciar si hay conexión, red eléctrica, wifi…
En la parte trasera tenemos la antena, que debe estar orientada hacia arriba, y una serie conexiones.
La cantidad de conexiones puede variar de un dispositivo a otro, aunque todos tienen como mínimo una conexión WAN, otra LAN, POWER y RESET.
En la parte inferior siempre hay una placa o etiqueta en la que encontraremos la IP de acceso y en muchos casos la contraseña y el nombre de usuario que viene por defecto, además de otras especificaciones técnicas.
Esas claves para el nombre de usuario y la contraseña son muy importantes a la hora de aprender cómo cambiar la contraseña del router.

Alterando la configuración del router
Es muy recomendable cambiar la contraseña que viene por defecto, pues estas son fáciles de saltar. Saber cómo cambiar la contraseña del router nos proporcionará mayor seguridad a la hora de usar nuestra Wifi y más autonomía a la hora de resolver problemas.
Existen muchos casos de personas intrusas que se aprovechan de la red de otras accediendo sin permiso y de forma ilegal, haciendo que esta se ralentice.
Es por ello que la seguridad se ha convertido en una cuestión básica a la hora de sacarle el máximo rendimiento a nuestra Wifi y el cambio de clave es un paso esencial para mantener nuestra red segura.
Si nunca has cambiado la clave del módem será muy fácil introducirse en tu Wifi, solo hay que enterarse de cuál era la contraseña predeterminada y podrá acceder sin el menor problema.
En internet se pueden encontrar listas con las contraseñas predeterminadas que muchas compañías utilizan.
Si notas tu red cargada, más lenta, sientes que los equipos tardan en conectarse o que la conexión va y viene, muy probablemente alguien se está aprovechando de tu conexión.
Ahora conoces las principales razones para descubrir cómo cambiar la contraseña del router.
La IP
Conocer tu IP es el primer paso, pues es la vía de acceso al panel de configuraciones de tu router. Para saber cuál es podemos acceder a algunas de las muchas páginas web que nos la facilitarán o a través de nuestro ordenador, entrando con Windows en cmd o command prompt y posteriormente con el comando ipconfig, en el cuadro nos aparecerá toda la información necesaria.
Muchos módems nos la facilitan en su parte inferior. Incluso podemos intentarlo directamente pues la gran mayoría de compañías unas la IP 192.168.1.1, la 192.168.0.1 o la 192.168.2.1.
Escribimos uno de estos códigos en nuestro navegador y si es el correcto rápidamente nos llevarán a un panel de control para hacer login, donde nos pedirán el nombre de usuario y la contraseña.
Por defecto suelen ser admin/admin o admin/1234. Si no fuese así, deberíamos contactar con nuestro proveedor o buscarlas en internet.
La nueva clave debe ser larga y combinar mayúsculas, minúsculas y números. También se recomienda alterarla de vez en cuando.
Desde el menú de configuración podremos alterar una infinidad de funciones. La mejor forma de adquirir conocimientos sobre ellos es leer manuales, ver vídeo-tutoriales, entrando en foros en los que se debate sobre distintas cuestiones y siempre podemos ver la opinión de algún experto…
La importancia de aprender cómo cambiar la contraseña del router está básicamente en la seguridad por lo que es importante conocer algunos conceptos sobre ella.
Por ejemplo, la configuración de los puertos es elemental. Los puertos que no se usen deben estar cerrados porque ellos son la puerta de entrada y salida de información y en caso de estar abiertos podrían dejar entrar datos no deseados.
Si usamos la UPnP (Universal Plug and Play), debemos tener cuidado también, porque es un sistema mediante el cual dos equipos se conectan produciendo la apertura automática del puerto. Podría entrar un virus de esta forma porque se salta los protocolos habituales de seguridad.
La MAC es un método muy seguro, aunque también tiene inconvenientes. El MAC filter es un filtro que nos ayudará a crear listas con los dispositivos que se pueden conectar o no.
El problema es que si tenemos a un amigo en casa y queremos que se conecte habría que entrar y configurarlo para que pueda tener conexión. No sería instantáneo. En la parte de abajo del router también es posible encontrar información acerca de la MAC.
El QoS (Quality of Service). Este sistema, que se puede traducir como calidad de servicio, y es un mecanismo que sirve para priorizar un tipo de datos sobre otros.
En nuestra Wifi siempre habrá varios dispositivos conectados a la vez que usarán distinto tipo de datos: imágenes, vídeo, texto… El QoS nos ayuda a seleccionar qué tipo de datos son prioritarios dentro de nuestra red. De este modo la capacidad estará mejor aprovechada.
Si nos quedamos justos de espacio lo más importante no será un problema. Si tu red tiene capacidad de sobra para el uso que le das, tal vez, no sea una opción muy útil para ti.
La NAT (Network Address Translation) o traducción de direcciones de red es un sistema de intercambio de datos entre paquetes de datos que no son compatibles.
Para trabajar con él debemos entrar en las configuraciones avanzadas y determinar el puerto que vamos a usar y su número. La NAT nos ayuda a conseguir que diferentes equipos se conecten bajo una misma IP. Gracias a este sistema se han ahorrado muchas direcciones y ha conseguido que las redes públicas no se hayan saturado.
Cuando solo existía la IPv4, con capacidad para 4.3 millones de direcciones estas empezaron a escasear, por suerte, fue desarrollado el IPv6 con una capacidad casi infinita.
Otra ventaja de NAT es que facilita la administración de redes. Cuando se cambia de servidor web entre dispositivos no hay problemas con los enlaces, solo hay que redireccionar NAT hacia el nuevo dispositivo. También es importante destacar que NAT no es un servidor proxy.
Procedimientos
En este apartado vamos a ver los pasos a seguir a la hora de averiguar cómo cambiar la contraseña del router.
Existen varias formas de proceder. Los expertos siempre recomiendan en primer lugar, leer en manual para adquirir unas nociones básicas y familiarizarnos con distintos conceptos.
Es importante tener en cuenta que lo más seguro es que nos veamos obligados a resetear el módem de manera que perderemos las configuraciones, puesto que volveremos al estado de fábrica.
De este modo recuperamos la contraseña que venía por defecto, en caso de haberla olvidado, algo que ocurre con frecuencia, y ya estaremos listos para comenzar todos los pasos necesarios para recuperar el control pleno de nuestra Wifi. Veámoslo con más detenimiento.
- Mantener presionado el botón reset (o de reinicio), ubicado en la parte posterior del router, durante más de 10 segundos. Tal vez, haya que mantener pulsado el botón un poco más, pero es normal. En el momento que se produzca el reinicio, lo podremos percibir a través del parpadeo de las luces. Veremos que se apagan y se vuelven a cargar de nuevo. Tardará unos minutos desde el reseteo hasta que vuelva a su estado normal.
- Conectar el ordenador a uno de los puertos del módem que no sea el WAN. En muchos casos encontraremos una página en la cual tendremos que iniciar sesión para poder acceder al menú de configuración. La función inalámbrica debe permanecer desactivada, dado que conectaremos el cable de Ethernet.
- En la barra de direcciones de nuestro navegador web debemos escribir la dirección IP para poder acceder a la configuración. Debemos conocer el código correcto, normalmente es 192.168.1.1 o 192.168.0.1. Este código es el que deberemos insertar en nuestro navegador y nos llevará hasta el menú necesario.
- Acceder a las configuraciones con nuestro login (o nombre de usuario) y password (o contraseña). Por defecto el nombre y la contraseña suelen ser admin/1234 o admin/admin.
- Accedemos al menú para hacer la modificación. Aquí es importante resaltar que cada compañía tiene su propio menú, por lo que tendremos que averiguar dónde está el apartado para cambiar la contraseña, de cualquiera de las maneras, no es nada difícil. Una vez allí tendremos la posibilidad de cambiar la contraseña. Una contraseña ideal es una contraseña con bastantes caracteres, que combina letras y números y que no nos resulte difícil de recordar.
También se recomienda hacer cambios en la contraseña con cierta frecuencia para aumentar el nivel de seguridad y evitar así cualquier intruso.